"Ama cuando menos se merezca, porque es cuando más se necesita"

miércoles, 30 de mayo de 2012

ILUSIÓN DE LOS ROSTROS GROTESCOS

¡Hola!

Hago una entrada flash para compartir con vosotros un artículo y un vídeo muy interesantes y entretenidos. Os quitarán sólo unos minutos, es muy breve. Pincha aquí para ver el enlace. 

¿Qué os ha parecido? 

¡Al final resulta que realizar caricaturas tiene su truquito!

Gracias por la visita, ¡un abrazo!

Nota. Aquí cito la fuente del artículo:
Tangen, J. M. et. Al. (2011) Flashed face distortion effect: grotesque faces from relative spaces. Perception; 40(5):628-630.

martes, 29 de mayo de 2012

AUTOESTIMA (3)

¡Hola! Aquí estoy una semana más con la incorporación de un nuevo ejercicio sobre la Autoestima. Si este es el primer post del blog que lees, te recomiendo que comiences por el que se titula AUTOESTIMA (1) para que comprendas bien todo el concepto de lo que estamos trabajando y así puedas realizar el ejercicio si te apetece.

Espero que aquellos que lo estáis llevando a cabo os esté resultando útil, pero, como siempre digo, si tenéis algún problema podéis escribirme o pedirme mi correo si creéis que es algo muy personal. 

Bien, vamos a continuar. Ya hemos hecho la mitad del recorrido, ahora quedan otros cuatro pensamientos distorsionados sobre los que trabajar. ¡Ánimo! Ya sabéis que todo se puede lograr, siempre y cuando nos esforcemos y le pongamos energía. Debemos confiar en nosotros mismos y en nuestras capacidades, este es nuestro trabajo, nuestra lucha, y vamos a vencer.

Los dos pensamientos distorsionados que vamos a trabajar esta semana son los siguientes:


  1. Personalización: consiste en suponer que todo lo que sucede tiene que ver con nosotros mismos. A menudo se acompaña de comparaciones negativas hacia los demás. Por ejemplo, si vemos que alguien que está a nuestro lado tiene mala cara, en seguida pensamos qué le habremos hecho.
  2. Lectura del pensamiento: se refiere a que hacemos suposiciones sobre lo que los demás están pensando. A menudo suelen ser suposiciones negativas de los demás hacia uno mismo, por ejemplo, suponer que alguien está pensando mal de ti, que no le interesas, etcétera, sin tener evidencias reales de ello.
Como veis, estos dos tipos de pensamiento tienen mucho que ver con el hecho de juzgar, comparar y suponer, justo de lo que he estado haciendo mucho hincapié en los ejercicios. Me gustaría que pusieras especial esfuerzo esta semana en detectarlos y trabajarlos, pues son muy comunes y en muchas ocasiones uno no es consciente de ellos. Si has estado realizando los ejercicios durante estas dos semanas, seguramente ya te sabrás de memoria los puntos que hay que trabajar. Ahora hay que aplicarlos a estos dos aspectos que hemos definido hoy. Voy a copiar de nuevo el ejercicio en sí por si necesitas repasarlo:

EJERCICIO

Realiza los siguientes pasos durante una semana:
  • Ser consciente. Cada vez que te sientas mal contigo mismo/a o con una situación, piensa en el motivo y con qué está relacionado. Entiende bien la causa desenredando los hilos con paciencia y comprendiendo tus emociones y sentimientos. Escúchate.
  • Durante el día ve autoobservándote, de manera que notes cuándo estás realizando alguno de los dos tipos de pensamiento explicados anteriormente. Durante los primeros 3 días, basta con que te des cuenta, aunque sea tarde, pero a partir del cuarto día debes procurar darte cuenta en el momento para que, de ahí en adelante, puedas afrontarlo en cuanto aparezca por tu mente.
  • Centrarnos en lo positivo. Esto podemos dividirlo en dos partes: una es que te centres más en lo que haces bien que mal. Piensa que todos hacemos unas cosas mejor que otras y no que tú eres la única persona que realiza algo concreto mal. También haces otras cosas muy bien, por tanto no te quedes con lo negativo porque seguro que tienes motivos para hacerlo en positivo. La otra es que transformes los pensamientos negativos en positivos. Por ejemplo, cuando te venga a la cabeza algo parecido a "no soy bueno/a en esto", piensa "soy bueno/a en esto". Al principio, quizá lo notes forzado, pero como todo en la vida, la práctica lo hará más natural y no te costará esfuerzo pensar de esta manera cuando hayas practicado lo suficiente. Así, tendrás otra predisposición en el momento en el que vayas a hacer las cosas que en un principio creas que te pueden dar problemas.
  • Y esto también nos lleva a un punto muy importante: evitar juzgar y comparar. Como he señalado antes, cada persona tiene unas cualidades distintas, por lo que no sirve para nada compararnos con los demás (siempre que las comparaciones sean en negativo). Sólo supondrían un gasto inútil de energía. De igual modo, pensar que alguien es "esto" o "aquello" no es útil, puesto que juzgar es una forma disfrazada de comparar, y ya hemos concluido que es innecesario y perdemos más de lo que ganamos. Por otro lado, tendemos a intentar adivinar lo que otros piensan de nosotros y, normalmente, las personas de baja autoestima suelen creer que lo que los demás piensan de nosotros es negativo, cuando puede ser que estén pensando todo lo contrario. Otra vez, realizar este tipo de acciones no sólo no sirve de nada, sino que además nos hace daño y nos aleja de la realidad. Viéndolo así es sencillo, pero cuando estamos en la situación no nos percatamos. Esto es lo que te pido que hagas, que te des cuenta y cortes la cadena de pensamientos.
Sigue anotando durante una semana en una especie de diario estas situaciones y pensamientos y ve aplicando razonadamente cada una de estas pautas, autoexplicándote cada paso y pensando por cual pensamiento debes reemplazar el incorrecto. La finalidad de escribirlos es ayudarnos a memorizarlo y a comprenderlo mejor, por eso es muy importante que lo realices de esta manera.

De nuevo, gracias por vuestro tiempo.
Hasta la semana que viene.


(NOTA: aquí os dejo el link de la página que, mezclada con mis propias explicaciones y experiencia profesional, han dado como resultado esta publicación)



martes, 22 de mayo de 2012

AUTOESTIMA (2)

Este nuevo post es la segunda parte del anterior, por esto, si es la primera vez que visitas mi blog, te invito a leer la publicación titulada AUTOESTIMA (1) para comprende mejor el concepto y el ejercicio que estamos llevando a cabo.

Para los que habéis realizado el ejercicio, ¿qué tal os ha ido? Si habéis tenido alguna dificultad, podéis hacérmelo saber en los comentarios si os apetece. Hoy vamos a continuar con los pensamientos distorsionados. La vez pasada vimos la sobregeneralización y la designación global. En esta ocasión vamos a ver otros dos:


  1. Pensamiento polarizado: es el pensamiento del todo o nada. O aquello en lo que estamos centrados es perfecto, o no es válido; o está bien o mal; o conmigo o contra mí. 
  2. Autoacusación: consiste en culparse de todo. Por ejemplo, pensar que si mi madre está haciendo la comida y se le ha quemado, es mi culpa por haberle preguntado en un pequeño momento concreto si le gustaba mi peinado.


A continuación voy a copiar el procedimiento que ya expliqué en el post anterior, para que os sea más cómodo y no tengáis que bajar a buscar el lugar preciso en el que se encuentra.

EJERCICIO

Realiza los siguientes pasos durante una semana:
  • Ser consciente. Cada vez que te sientas mal contigo mismo/a o con una situación, piensa en el motivo y con qué está relacionado. Entiende bien la causa desenredando los hilos con paciencia y comprendiendo tus emociones y sentimientos. Escúchate.
  • Durante el día ve autoobservándote, de manera que notes cuándo estás realizando alguno de los dos tipos de pensamiento explicados anteriormente. Durante los primeros 3 días, basta con que te des cuenta, aunque sea tarde, pero a partir del cuarto día debes procurar darte cuenta en el momento para que, de ahí en adelante, puedas afrontarlo en cuanto aparezca por tu mente.
  • Centrarnos en lo positivo. Esto podemos dividirlo en dos partes: una es que te centres más en lo que haces bien que mal. Piensa que todos hacemos unas cosas mejor que otras y no que tú eres la única persona que realiza algo concreto mal. También haces otras cosas muy bien, por tanto no te quedes con lo negativo porque seguro que tienes motivos para hacerlo en positivo. La otra es que transformes los pensamientos negativos en positivos. Por ejemplo, cuando te venga a la cabeza algo parecido a "no soy bueno/a en esto", piensa "soy bueno/a en esto". Al principio, quizá lo notes forzado, pero como todo en la vida, la práctica lo hará más natural y no te costará esfuerzo pensar de esta manera cuando hayas practicado lo suficiente. Así, tendrás otra predisposición en el momento en el que vayas a hacer las cosas que en un principio creas que te pueden dar problemas.
  • Y esto también nos lleva a un punto muy importante: evitar juzgar y comparar. Como he señalado antes, cada persona tiene unas cualidades distintas, por lo que no sirve para nada compararnos con los demás (siempre que las comparaciones sean en negativo). Sólo supondrían un gasto inútil de energía. De igual modo, pensar que alguien es "esto" o "aquello" no es útil, puesto que juzgar es una forma disfrazada de comparar, y ya hemos concluido que es innecesario y perdemos más de lo que ganamos. Por otro lado, tendemos a intentar adivinar lo que otros piensan de nosotros y, normalmente, las personas de baja autoestima suelen creer que lo que los demás piensan de nosotros es negativo, cuando puede ser que estén pensando todo lo contrario. Otra vez, realizar este tipo de acciones no sólo no sirve de nada, sino que además nos hace daño y nos aleja de la realidad. Viéndolo así es sencillo, pero cuando estamos en la situación no nos percatamos. Esto es lo que te pido que hagas, que te des cuenta y cortes la cadena de pensamientos.
Sigue anotando durante una semana en una especie de diario estas situaciones y pensamientos y ve aplicando razonadamente cada una de estas pautas, autoexplicándote cada paso y pensando por cual pensamiento debes reemplazar el incorrecto. La finalidad de escribirlos es ayudarnos a memorizarlo y a comprenderlo mejor, por eso es muy importante que lo realices de esta manera.

Recuerda que todo se puede lograr, siempre cuando le pongamos esfuerzo y energía. Piensa en ti mismo/a, por ejemplo, ya has conseguido muchas cosas a lo largo de tu vida, por lo tanto eres capaz de conseguir lo que te propongas. Confía en ti y en tus capacidades, y no tengas tan presente lo que opinen los demás.

Espero que os esté yendo bien y os recuerdo que podéis consultarme las dudas. La semana que viene colocaré otros dos pensamientos distorsionados comunes. ¡Ánimo!

Gracias por vuestro tiempo y que tengáis una buena semana.
Hasta pronto.

(NOTA: aquí os dejo el link de la página que, mezclada con mis propias explicaciones y experiencia profesional, han dado como resultado esta publicación)

martes, 15 de mayo de 2012

AUTOESTIMA (1)

Muchas son las publicaciones que podemos leer hoy en día acerca de la autoestima, e incluso puede que nos sepamos  muy bien la teoría, pero luego, ¿notamos los resultados? En caso de que la respuesta sea negativa, ¿a qué podría deberse? Pues una de las razones es que todo cambio requiere un esfuerzo, por pequeño que sea, sólo con saber algo no es suficiente. Hay que actuar.

Por eso propongo para aquellas personas que consideren que no han obtenido resultados leyendo sobre el tema, una serie de pasos a seguir con el fin de lograrlo, y os invito a todos aquellos a los que os interese a realizar estos ejercicios. Para implicarme un poquito en la situación, haré una publicación titulada "Autoestima" a tiempo real, es decir, cuando considere que los pasos que indico más abajo se han ido superando.

Me gustaría comenzar haciendo una definición breve y sencilla sobre qué es la autoestima: es la valoración que hacemos sobre nosotros mismos a partir de las sensaciones y experiencias que hemos ido incorporando a lo largo de la vida.

Detengámonos un instante ante estas palabras y hagamos una reflexión. Si es una valoración que se da a lo largo de la vida, entonces es algo subjetivo, (es decir, depende de nuestra opinión o punto de vista) y por tanto es susceptible de cambio, pues además, a día de hoy, seguimos viviendo y por tanto podemos seguir cambiando. De aquí podemos sacar la primera conclusión: puedo cambiar mi percepción de mí mismo. Al mismo tiempo, nos dice que proviene de nuestras sensaciones y experiencias. Las nuestras y las de nadie más (porque incluso el aprendizaje por observación es nuestra experiencia, es lo que nosotros vemos e interpretamos). Entonces, ¿por qué en la mayoría de los casos nos preocupamos tanto de lo que piensan los demás, si lo que vale es mi percepción de mí mismo/a? Si son sensaciones, eso quiere decir que puedo percibirlas y, por tanto, razonarlas y entenderlas.

Ahora, visto así, tenemos ya la certeza de que es algo modificable, y de que no tenemos porqué cargar toda la vida con el peso de una baja autoestima. Pero, ¿por qué no nos damos cuenta de todo lo que sabemos o hemos leído acerca de ella? Porque la baja autoestima va acompañada de una distorsión del pensamiento, es decir, la persona tiene una visión distorsionada de lo que realmente es o de lo que hace. Los pensamientos más comunes son varios, y los iremos afrontando poco a poco. Comenzaremos por dos de ellos:

  1. Sobregeneralización: consiste en tomar un hecho concreto como una ley general. Por ejemplo, si he suspendido un examen, ya pienso que no valgo para los estudios.
  2. Designación global: a diferencia del anterior, este pensamiento se caracteriza por emplear términos peyorativos/negativos hacia nosotros mismos ante una situación adversa. La persona saca una conclusión negativa acerca de sí misma y se designa la causa. Por ejemplo, supongamos el mismo caso anterior: he suspendido un examen y entonces pienso que soy tonto/a, torpe, poco inteligente, etc.
Teniendo estos dos tipos de pensamiento definidos, te propongo un ejercicio. Si presentas uno o los dos tipos, te invito a que pases una semana reflexionando acerca de ellos y realizando la actividad que te voy a describir a continuación. En caso de que creas que no presentas alguno de estos dos, igualmente intenta ser más consciente de tus pensamientos y emociones esta semana, y la semana que viene colocaré los siguientes dos pensamientos distorsionados, y así sucesivamente hasta que veamos los 8 y te identifiques con los que sueles tener.

EJERCICIO

Realiza los siguientes pasos durante una semana:
  • Ser consciente. Cada vez que te sientas mal contigo mismo/a o con una situación, piensa en el motivo y con qué está relacionado. Entiende bien la causa desenredando los hilos con paciencia y comprendiendo tus emociones y sentimientos. Escúchate.
  • Durante el día ve autoobservándote, de manera que notes cuándo estás realizando una generalización de alguno de los dos tipos explicados anteriormente. Durante los primeros 3 días, basta con que te des cuenta, aunque sea tarde, pero a partir del cuarto día debes procurar darte cuenta en el momento para que, de ahí en adelante, puedas afrontarlo en cuanto aparezca por tu mente.
  • Centrarnos en lo positivo. Esto podemos dividirlo en dos partes: una es que te centres más en lo que haces bien que mal. Piensa que todos hacemos unas cosas mejor que otras y no que tú eres la única persona que realiza algo concreto mal. También haces otras cosas muy bien, por tanto no te quedes con lo negativo porque seguro que tienes motivos para hacerlo en positivo. La otra es que transformes los pensamientos negativos en positivos. Por ejemplo, cuando te venga a la cabeza algo parecido a "no soy bueno/a en esto", piensa "soy bueno/a en esto". Al principio, quizá lo notes forzado, pero como todo en la vida, la práctica lo hará más natural y no te costará esfuerzo pensar de esta manera cuando hayas practicado lo suficiente. Así, tendrás otra predisposición en el momento en el que vayas a hacer las cosas que en un principio creas que te pueden dar problemas.
  • Y esto también nos lleva a un punto muy importante: evitar juzgar y comparar. Como he señalado antes, cada persona tiene unas cualidades distintas, por lo que no sirve para nada compararnos con los demás (siempre que las comparaciones sean en negativo). Sólo supondrían un gasto inútil de energía. De igual modo, pensar que alguien es "esto" o "aquello" no es útil, puesto que juzgar es una forma disfrazada de comparar, y ya hemos concluido que es innecesario y perdemos más de lo que ganamos. Por otro lado, tendemos a intentar adivinar lo que otros piensan de nosotros y, normalmente, las personas de baja autoestima suelen creer que lo que los demás piensan de nosotros es negativo, cuando puede ser que estén pensando todo lo contrario. Otra vez, realizar este tipo de acciones no sólo no sirve de nada, sino que además nos hace daño y nos aleja de la realidad. Viéndolo así es sencillo, pero cuando estamos en la situación no nos percatamos. Esto es lo que te pido que hagas, que te des cuenta y cortes la cadena de pensamientos.
Ve anotando durante una semana en una especie de diario estas situaciones y pensamientos y ve aplicando razonadamente cada una de estas pautas, autoexplicándote cada paso y pensando por cual pensamiento debes reemplazar el incorrecto. La finalidad de escribirlos es ayudarnos a memorizarlo y a comprenderlo mejor, por eso es muy importante que lo realices de esta manera.

Recuerda que todo se puede lograr, siempre cuando le pongamos esfuerzo y energía. Piensa en ti mismo/a, por ejemplo, ya has conseguido muchas cosas a lo largo de tu vida, por lo tanto eres capaz de conseguir lo que te propongas. Confía en ti y en tus capacidades, y no tengas tan presente lo que opinen los demás.

Mucho ánimo y ahora, ¡a realizar el ejercicio! La semana que viene aplicaremos estos pasos a otros dos tipos de pensamientos distorsionados, por lo tanto ya tendréis un poco más de práctica.

Gracias por vuestro tiempo y que tengáis una buena semana.
Hasta pronto.

(NOTA: aquí os dejo el link de la página que, mezclada con mis propias explicaciones y experiencia profesional, han dado como resultado esta publicación)